En España hay siete especies autóctonas y al menos dos exóticas, pero los efectos de sus ataques son leves.
El «verano» de abril dejó al país con las escenas típicas de julio y agosto: playas y parques llenos de gente tomando el sol y chiringuitos abarrotados de gente. Además, cuando aparecen las altas temperaturas, comienzan a aparecer individuos inesperados: los alacranes.
En total, existen siete especies de esta araña en España, distribuidas por toda la península y dos archipiélagos.
De igual forma, además de las especies nativas, existen al menos otras dos especies exóticas que también provienen de otros ecosistemas.
¿Qué alacranes hay en España?
En España existen siete especies de escorpiones, que se encuentran en diferentes puntos del país.
A continuación se detallan sus nombres científicos: Buthus occitanus, Buthus ibericus, Buthus montanus, Buthus elongates, Euscorpius flavicaudis, Euscorpius balearicus y Belisarius xambeui, según enumera el Ministerio de Cambio Ecológico.
Las Islas Baleares y Canarias también albergan escorpiones, aunque son una especie invasora, ajena a las islas. En Baleares, Euscorpius balearicus habita en las zonas rocosas y más secas de Mallorca y Menorca, y en Canarias nos encontramos con Centruroides gracilis, especialmente en Tenerife, aunque en realidad proviene de África.
¿Qué pasa si te muerden?
A pesar de su mala fama, los alacranes en nuestro país rara vez provocan picaduras mortales o graves.
El Servicio de Información Toxicológica (SIT) explica que «dada la pequeña cantidad de veneno utilizada, sus picaduras rara vez son graves», por lo que sus efectos no son comparables a los de sus homólogos similares en otros países, pudiendo provocar la muerte.
Para evitar ser mordido por uno de estos animales cuando empiezan a emerger, debes:
Use calzado apropiado: Se deben usar zapatos o botas cerrados al caminar en áreas donde pueda haber alacranes.
Revisa tu ropa y zapatos antes de ponértelos ya que pueden quedar ocultos.
Tenga cuidado al revisar cajones y estantes.
Evite meter la mano en agujeros o grietas y tenga cuidado al levantar rocas o troncos.
Gracias por ver
Cuando estás a punto de ser picado, lo más importante es no entrar en pánico y esperar hasta que aparezcan los síntomas para contactar inmediatamente con el centro médico más cercano.
En algunos casos, las víctimas de esta araña pueden experimentar dolores musculares, calambres o temblores.
Sin embargo, lo más normal es que todos estos síntomas desaparezcan por completo al cabo de 48 horas.